Zack Clements es un chico que logró sobrevivir tras haber sido declarado muerto clínicamente por 20 minutos con 17 años mientras entrenaba fútbol en la escuela Victory Life Academy, en Brownwood, Texas.
Durante 20 minutos un entrenador, sus compañeros de clase y un equipo de paramédicos le aplicaron técnicas de reanimación cardio pulmonar intentando revivirlo. “La situación fue una de las más graves que había visto”, dice Gary Bay, director de la escuela secundaria y trabajador del equipo de ambulancia voluntario.
Zack narró que vio a Jesús junto a él y con la mano sobre su hombro le dijo que no se preocupara que todo iba a pasar.
“Durante 20 minutos, estuvo legalmente muerto”, confirmó la doctora cardióloga Lisa Roten, de 48 años de edad, que ayudó a cuidar a Zack.
Billy Clements, el padre de Zack dice que nadie puede hacer nada en contra de lo que vivió su hijo. Los doctores no pueden explicar lo que ocurrió con Zack, pero su familia está segura de que la mano de Dios intervino para traer a su hijo de vuelta a la vida. Los médicos dijeron a los padres de Zack que el pronóstico era desalentador.
«Nos preocupaba que pudiera haber sufrido un daño cerebral irreversible», dijo Billy. Cuando los doctores consiguieron su pulso, Zack fue llevado en helicóptero al Cook Children’s Hospital en Forth Worth, en donde despertó días después en la unidad de cuidados intensivos.
Una vez que su corazón volvió a latir por sí solo los médicos pusieron al chico en coma inducido, bajando la temperatura de su cuerpo para ayudar a su cerebro a recuperarse del trauma. La doctora Lisa y el resto del equipo médico se sorprendieron cuando Zack se despertó varios días después y estaba consciente de su entorno.
Su recuperación fue sorprendente, pero lo más asombroso fue lo que vivió cuando su corazón dejó de latir. «Cuando tenía 20 minutos, vi a un hombre que tenía cabello largo y rizado, y una especie de barba gruesa y no me tomó mucho tiempo para darme cuenta de que se trataba Jesús», dijo Zack. Para su familia la escena que Zack describe es una clara evidencia de que su recuperación fue un milagro.
“Me acerqué a Él y puso su mano en mi hombro y me dijo: “Todo estará bien, no te preocupes””, dijo Zack. Billy dijo que aunque la historia de su hijo es difícil de creer es lo único que tiene sentido para ellos. “Planeo vivir todo lo que me queda de vida al máximo. Ahora valoro más el hecho de estar vivo, me he vuelto más humilde”, contó Zack.
Teresa, la madre de Zack aceptó que su hijo volvió a la vida gracias a la intervención divina. «Estoy feliz de que Él decidió dejarme tener a mi bebé de vuelta», dijo Teresa. El corazón de Zack falló debido a un problema de ritmo, inflamación y una arteria coronaria levemente anormal, dijo la doctora Lisa.
“Tuvo mucha suerte. Generalmente el paciente permanece en coma y no despierta”, finalizó la doctora Lisa.
Deja tu opinión sobre el caso, y compartelo con todos.