Este gentil gigante fue nombrado el elefante más solitario y triste del mundo por su expresión y condición de vida.
Pero finalmente se le ha permitido dejar su recinto y vivir el resto de su vida en mejores condiciones.
El elefante Kaavan, que había sido mantenido en condiciones horribles en un zoológico paquistaní durante 35 años, finalmente ha conseguido su transferencia luego de una campaña de cuatro años para rescatar al animal.
Como explicó Martin Bauer de Four Paws, una organización internacional de bienestar animal, Kaavan ya se ha sometido a un examen médico y ha sido aprobado para su transferencia.
Según el portavoz, lo más probable es que el elefante sea trasladado a un santuario en Camboya, donde podrá encontrar consuelo en la libertad de movimiento y otros animales de rescate.
En mayo, el Tribunal Superior de Pakistán ordenó el cierre del zoológico de Marghazar tras años de negligencia animal y malas condiciones de vida en el parque.
“Desafortunadamente, el rescate llega demasiado tarde para dos leones que murieron durante un intento de traslado a fines de julio después de que los cuidadores de animales locales prendieran fuego en su recinto para obligarlos a entrar en sus jaulas de transporte”, explicó Bauer.
Sin embargo, el cierre del zoológico finalmente permitió a los activistas seguir adelante con su agenda para liberar a Kaavan de su vida solitaria en el zoológico.
Como reveló el examen médico del elefante, Kaavan muestra signos de desnutrición a pesar de tener sobrepeso. Además, el pobre elefante se enfrenta a una serie de problemas de salud física, como uñas agrietadas y demasiado grandes, causadas por vivir en un recinto diminuto durante años.
Según Bauer, la recuperación de Kaavan será larga y difícil, especialmente porque el elefante también sufre problemas de comportamiento causados por la soledad.
“También desarrolló un comportamiento estereotipado, lo que significa que mueve la cabeza de un lado a otro durante horas. Esto se debe principalmente a que simplemente está aburrido”, explicó Bauer.
A pesar de todos los desafíos, los expertos de Four Paws examinaron a fondo a Kaavan y determinaron que está listo para ser trasladado a un santuario de elefantes donde vivirá el resto de sus años.
¡Le deseamos un final feliz a este precioso que jamás debió sufrir así!