Sebastian Pickersgill y Marie Fowler tienen un aspecto bastante peculiar.

Son amantes de los tatuajes, los piercings y a otras modificaciones corporales más extremas como las lenguas bifurcadas o la suspensión corporal. Su estilo de vida consiste en realizar tantos viajes como sea posible. La pareja es de origen británico.

Ahora, se encuentran en Australia pero se han visto en la obligación de buscar un trabajo para poder sostenerse y continuar conociendo el país. Pero, no han logrado conseguirlo. “Llevamos más de un mes intentando conseguir empleo. Intento buscar nuevas ideas y formas de mantenernos pero queremos pedirles ayuda”.

La joven pareja no está dispuesta a rendirse y decidió acudir a sus redes sociales para buscar un trabajo en la región de Newcastle. Además de los vistosos tatuajes, Sebastian tiene dreadlocks y Marie se tiñe su cabello de colores brillantes.

“Queremos trabajar o al menos tener una entrevista. Estamos entregando resúmenes curriculares. Podemos trabajar bajo una visa 417”. Tienen un aspecto poco convencional y esto puede resultar un factor muy importante para cualquier empresa. Ellos mismos bromearon y dijeron que si no conseguían nada empezarían a cobrar por las conversaciones que sostienen con sus seguidores en Snapchat.

“Deberían ser modelos, influencers o personalidades de YouTube. Si quieren algo más convencional sólo imagino trabajo agrícola o minoristas. Los tatuajes faciales son un tabú en los trabajos”, dijo un usuario en redes sociales.

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