Varias decenas de presos se han fugado este lunes de la cárcel de Foggia, en Apulia (sur), mientras que las revueltas comienzan en distintas penitenciarias de todo el país, después de las medidas restrictivas del Gobierno para prevenir el brote del coronavirus.
Ya han huido más de 50 presos de esta cárcel y 36 han sido atrapados y devueltos a la celda, no obstante, la Federación de Sindicatos Autónomos de la Policía Nacional Penitenciaria de Italia ha informado que el número es más alto y por lo menos 300 presos siguen fugitivos, mientras que los capturados serían 65.
El escape masivo tuvo lugar en la madrugada de este lunes, luego de que muchos de los presos treparan por las puertas de la prisión y lograran salir a la calle.
Las protestas por las medidas tomadas por el Gobierno para contener el brote del coronavirus, que ha causado al menos 360 muertos y casi 6.900 contagiados según el último informe oficial del domingo, han causado molestias en las prisiones, ya que una de las iniciativas ha sido suspender las visitas de familiares por precaución.
En Milán un grupo de presos ha logrado subir al tejado de la prisión de San Vittore y prender fuego a sus sábanas mientras gritaban “libertad, queremos libertad”.
Ante estos problemas, el dirigente del Partido Demócrata Franco Mirabelli ha solicitado que los presos que están a punto de cumplir su condena puedan finalizarla en arresto domiciliario para evitar problemas de hacinamiento.
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