Un juez de Missouri le prohibió a los padres de una niña de 4 años asistir a su funeral, luego de que perdió la vida a manos de sus vecinos en torturas de las que ellos eran testigos sin intervenir.

Mary Mast, de 29 años, y James Mast, de 28, de Lincoln, se declararon inocentes esta semana de los cargos en su contra por poner en peligro de muerte a una menor, en relación al asesinato de su hija. En la lectura de cargos fue rechazada una solicitud por parte de ambos para asistir al funeral de la niña.

Los avances de la investigación muestran que Ethan Mast, de 35 años, y Kourtney Aumen, de 21, vecinos de la pareja, agredieron a la niña durante dos semanas, para librarla de un “demonio”. James Mast admitió que tanto él como su esposa observaron a los vecinos golpear salvajemente a su hija.

El padre destacó que no intervino para proteger a su hija porque sus vecinos los amenazaron con agredirlos o “fusilarlos” si intentaban hacer algo. El hombre, que no tiene ninguna relación con Ethan Mast a pesar de la similitud de apellido, afirmó que también les dijeron que su esposa “tenía un demonio dentro”.

Ethan Mast le dijo a los investigadores que él y Aumen usaron un cinturón de cuero para golpear a la niña y después la “sumergieron” en un estanque helado. Cuando la policía fue llamada a la casa de la familia, los primeros agentes encontraron a la niña muerta y “con graves hematomas en su cuerpo”.

Aunque los involucrados han mencionado a “demonios” como motivo del crimen, las autoridades descartaron que se trate de algo religioso y afirman que el cruel asesinato se trató de un hecho aislado.

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